• Para ir en apoyo de los desafíos de la prolongada sequía que vive la Provincia de Choapa, la Compañía implementó un plan enfocado en la entrega de forraje, insumos veterinarios y bebederos. Este año, aumentó su cobertura, permitiendo la adquisición de insumos médicos, fardos de pasto y alimento.
• “Esta entrega de pasto es muy buena, porque nos ayuda en estos meses de invierno a alimentar a nuestro ganado, ya que la sequía nos ha azotado muy fuerte”, comentó Juan Saavedra, criancero de Quelén Alto.

La ganadería es una actividad tradicional que forma parte esencial de la identidad de la provincia de Choapa y que, además, aporta al desarrollo económico del territorio. En este contexto, y como respuesta a los desafíos de la prolongada sequía que afecta a la región desde hace más de una década, Minera Los Pelambres implementó en 2022 un plan de apoyo dirigido a crianceros y ganaderos, enfocado en la entrega de forraje, insumos veterinarios y bebederos.

Este año, el plan aumentó su cobertura a 60 millones de pesos, los que fueron destinados a la adquisición de 950 insumos médicos, 4.288 fardos de pasto beneficiando a los sectores de Chillepín, Cuncumén, Tranquilla y Quelén Alto en Salamanca y 1.052 unidades de alimento para ganado para el sector de La Aguada en Illapel. 

Una de las últimas entregas se realizó en Chillepín, donde Flavio Castro, presidente de la Junta de Vecinos, destacó el carácter colaborativo de la iniciativa. “Este es un compromiso conjunto entre diversas organizaciones de la comunidad, especialmente los ganaderos y Minera Los Pelambres, con el objetivo de mitigar los efectos de la sequía, que nos ha golpeado con fuerza. En esta entrega también se consideró a los crianceros de ganado menor, quienes hoy están recibiendo este importante apoyo en forma de fardos de pasto. Esta ayuda será clave para enfrentar el invierno, ya que garantizar un stock de alimento para los animales es uno de los mayores desafíos. Además, el alza en los precios por la escasez nos ha afectado directamente en el bolsillo, por lo que este aporte llega en un momento muy necesario”.

En Quelén Alto, Juan Saavedra, criancero del sector, valoró el impacto del programa: “En años anteriores ya nos habían entregado este apoyo, que nos permite tener pasto por unos meses para nuestros animales. La sequía nos ha golpeado muy fuerte todos estos años, se nos ha muerto el ganado. Por eso, estas ayudas son fundamentales para poder seguir adelante con nuestra crianza”.

Desde su implementación en 2022, el plan ha beneficiado a diversas organizaciones de ganado mayor y menor, mediante la entrega de 16.294 fardos de pasto, además de insumos veterinarios, alimento especializado y otros apoyos clave para mantener la actividad ganadera en la zona. Solo el año pasado la inversión consideró casi 50 millones de pesos.

Antonio Rubio, subgerente de Relaciones Comunitarias de Minera Los Pelambres, explicó el objetivo de este programa: “Entendemos que la ganadería es parte fundamental de la identidad y el sustento de muchas familias del Choapa. Por eso, contar con un plan de apoyo previo a la temporada invernal es clave para enfrentar los efectos de la sequía y aportar a la continuidad de esta actividad. Sabemos que, al anticiparnos, contribuimos no solo a proteger el ganado, sino también a mejorar la calidad de vida de crianceros y ganaderos que dependen de esta labor”.

Finalmente, desde Cuncumén, Dagoberto Ramírez, ganadero del sector, destacó la importancia de los insumos veterinarios recibidos: “Para nosotros es de gran ayuda, porque al tener los animales desparasitados y con vitaminas, reciben mejor el invierno y no se adelgazan tanto, lo que nos permite cuidar más a los animales. Es beneficiosa esta entrega porque es algo que no tenemos y que nos sirve”.

Gracias a este programa, crianceros y ganaderos del Choapa no solo han logrado asegurar alimento y cuidado veterinario para sus animales en temporada crítica, sino que también han fortalecido sus capacidades para resistir los efectos del cambio climático. La entrega de forraje, vitaminas y alimento especializado ayuda a mantener vigente una actividad productiva clave para las comunidades rurales, resguardando su economía local, su identidad cultural y el bienestar de las familias que dependen de la ganadería como forma de vida.